La atracción más cool de París

El concepto básico detrás del sistema de refrigeración urbana es que una fuente central abastece a varios edificios. Esto ofrece una serie de ventajas sobre los sistemas de aire acondicionado individuales, particularmente para una ciudad como París, donde muchos de los edificios tienen un valor histórico y arquitectónico significativo que prohíbe la instalación de unidades de aire acondicionado. Tener una fuente central también libera espacio, lo cual es una ventaja significativa dado el valor inmobiliario en París.

Además, el sistema de refrigeración urbana reduce el consumo de energía y el impacto medioambiental. Se estima que un edificio típico que utiliza el sistema genera un 20 por ciento menos de emisiones de dióxido de carbono y un 30 por ciento menos de fugas de refrigerante en comparación con un sistema de aire acondicionado individual.

Cada edificio cuenta con una subestación de entrega inteligente totalmente automatizada, que está conectada a una red de seis plantas de refrigeración urbana. Las seis plantas están ubicadas bajo tierra y tres de ellas utilizan agua extraída directamente del río Sena. Los otros tres utilizan una torre de refrigeración para refrigeración y se utilizan sólo durante el verano, cuando la demanda alcanza su punto máximo. Se estima que el uso del agua de los ríos ahorra unos 500.000 metros cúbicos de agua potable cada año.

El agua del río se bombea a la estación y se filtra para eliminar objetos extraños antes de pasar a través de un intercambiador de calor en el circuito de líquido refrigerante. Luego, el líquido refrigerante pasa a través de una unidad de refrigeración que contiene un condensador y un evaporador, que enfría el agua en el circuito de aire acondicionado. Luego el agua se bombea a los clientes individuales.

Inicialmente, Climespace, la empresa detrás del sistema, utilizaba diferentes intercambiadores de calor en cada subestación, pero pronto se dio cuenta de que sería más eficiente utilizar un solo proveedor. Así, la empresa firmó un contrato de tres años con Alfa Laval para el suministro de intercambiadores de calor de placas para 100 subestaciones. Poco después, la asociación se amplió cuando Climespace decidió buscar un proveedor que pudiera desarrollar un concepto estandarizado y ofrecer unidades de subestación completas en lugar de solo intercambiadores de calor. Junto con los fabricantes de sistemas franceses BBS, Alfa Laval ha podido ofrecer un concepto total desde el suministro de nuevos equipos hasta la instalación y el mantenimiento.

Con la última instalación, el sistema de refrigeración del distrito se ha ampliado hasta el Carrousel du Louvre, un centro comercial situado justo enfrente del Louvre, que sirve como una de las entradas principales del museo.

“Over the years, Alfa Laval has become a true partner and has contributed, thanks to its expertise and technology, to the performance of the Climespace energy network, which is the first district cooling system in Europe and one of the biggest in the world,” says Jean Levezac, Head of Cluster Connections/Substations at Climespace Engineering.